El blog de FOL de José Manuel Roca.- Premiado el trabajo en red y la apuesta por la coordinación.
El primer Certamen de Buenas Prácticas, organizado por la Red Andalucía Orienta, iniciativa a su vez de la Consejería de Empleo, ha tenido un resultado bastante positivo para la unidad portuense de establecimiento de redes con entidades/instituciones para el seguimiento global e los usuarios, que gestiona CCOO a través de Forem Andalucía, y cuya autoría es de Aránzazu Fuente, Pedro Sevilla, Nuria Pérez, María Reyes Corrales e Isabel Ariza (éstas dos últimas han estado en distintas fases del proyecto pero actualmente ya no se encuentran en el mismo), ya que han sido los ganadores de dicho certamen por el trabajo realizado.
La red Andalucía Orienta considera una buena práctica la experiencia o intervención que en virtud de una necesidad detectada se ha puesto en marcha de forma exitosa, de manera que la idea puede transferirse e implementarse en otros territorios, con otros colectivos y en otros ámbitos de actuación. Esta buena práctica se caracteriza por ser contextualizada, sostenible, efectiva, eficiente, transferible, documentada e innovadora.
Los profesionales que actualmente se hacen cargo del proyecto (que hunde sus raíces en 2005), Aránzazu Fuente, Pedro Sevilla y Nuria Pérez, vieron como interesante establecer redes de colaboración con distintas entidades del entorno, debido a que el perfil del demandante de empleo que acudía a las instalaciones del sindicato citado era muy variado. Así se vio la necesidad de crear una red o telaraña social, de ahí la importancia de este proyecto de cara al certamen de Andalucía Orienta, con los Servicios Sociales del Ayuntamiento, Salud Mental, Libertad Vigilada y protección de menores de Afanas, así como otras entidades que trabajan con colectivos específicos. La idea es “consultar y analizar si la persona que viene a nosotros tiene capacidad para trabajar”, arrancando así el proceso de análisis de su situación personal, sus estudios, formación, para ver si es necesario el reciclaje o simplemente reconducir su actitud con el objetivo final de la búsqueda de empleo. En definitiva, para poder hacer un seguimiento individualizado de sus posibilidades en el mercado laboral.
Con todo, hay que dejar claro que esta unidad de orientación profesional para el empleo recibe a cualquier demandante de empleo, pero parte de la base de estar preparada ante cualquier caso. Eso sí, dejan claro que si no pueden tratar a alguna persona por sus condiciones especiales, lo derivan a cualquier otro Orienta o unidad especializada. “La coordinación nos sirve para atender a la persona de manera global, facilitándonos mucho el trabajo”, insisten. Así, dejan claro que la coordinación y el entendimiento con otras unidades “es fácil, la relación es fluida y buena, y ademá mantenemos reuniones periódicas”, lo que ayuda a que el trabajo sea más sencillo.
Las cifras hablan por sí solas. Tan sólo en lo que va de año ya han recibido a unas 200 personas en las instalaciones citadas. “La cifra es más alta que otros años”, estando en curso cinco grupos de búsqueda de empleo, más otro que está pendiente de su puesta en marcha en breve espacio de tiempo, comentan. Si cada uno de estos profesionales en otras circunstancias o en épocas anteriores cubría unos 40 expedientes más o menos, lo que hacía posible incluso mantener una relación mucho más estrecha y cercana con el demandante de empleo, ahora el número de personas atendidas se duplica, debido sobre todo a la época de crisis actual. A pesar de que estas circunstancias hagan más complicado el seguimiento de los usuarios del servicio, el equipo de profesionales que está al frente de la unidad demuestra día a día que su esfuerzo y empeño están por encima de circunstancias como las que nos toca vivir. Cabe reseñar que actualmente es la única unidad de este tipo que funciona en la ciudad, contando con una población de más de 85.000 habitantes y una cifra de desempleados que ronda los diez mil.
Este grupo trabaja en este proyecto desde el 20 de enero (ya que no cuentan con un contrato anual que pueda atender las necesidades de los demandantes a lo largo de todo el año), y ese hecho y la situación de crisis hacen que la lista de espera fuera bastante importante, por lo que además hay que añadir el esfuerzo que realizan por atender a todas esas personas necesitadas de asesoramiento y que se han ido apuntando a lo largo de los meses en que el servicio no ha estado en funcionamiento, ya que dejan una lista abierta para todo el que la requiera.
Como indican, no todo usuario acaba dejando este servicio. “Hay quien está viniendo desde el principio”, es decir 2005, y abandona el programa porque encuentra trabajo, pero vuelve a sufrir una situación complicada en el mercado laboral y requiere de nuevo el apoyo y el asesoramiento de este grupo de profesionales. “Hay quien reconduce su vida laboral en poco tiempo, quien no lo tiene tan claro, quien encuentra trabajo con más facilidad, quien tiene más problemas”, y es que “todo depende de las características de cada persona y el trabajo individualizado que se hace con ella”.
Plan memta
Otra línea de actuación que siguen estos profesionales es el seguimiento y recepción de usuarios del Plan Memta. La idea es hacer grupos de orientación laboral para que puedan reconducir sus futuros profesionales debido a su situación actual de desempleo, ocasionadas por la situación de crisis. Recordar que el Plan Memta, así como Proteja y Feil (Fondos Estatales de Inversión Local), son iniciativas puestas en marcha por los gobiernos autonómico y central, con el fin de salvar la situación.
El Plan Memta contempla cuatro líneas de actuación: acciones específicas para la búsqueda de empleo, acciones de formación profesional intensivas, acciones para la adquisición de experiencia laboral, y acciones específicas en el marco de la colaboración social. Las tres primeras, como destacan desde la Delegación Provincial de Empleo, son a las que más empeño se les pone, debido a la particularidad de la situación actual.
Los usuarios de este programa llegan derivados del SAE (Servicio Andaluz de Empleo), recibiendo unos cursos para poder encauzar su vida laboral, y los que ya no cuentan con prestación social o desempleo acceden a una ayuda de 350 euros. La idea es no mezclar unos usuarios con otros (los del Plan Memta con aquellos a los que se trata con un estudio individualizado), aunque los del primero pueden acceder al tratamiento personalizado si así lo desean, pero hay que dejar claro que los programas son distintos. Importante a destacar es que la crisis arroja sobre todo ex empleados de la construcción pero también de puestos auxiliares, y por primera vez “peritos, arquitectos, y ese tipo de profesionales que no han tenido problemas nunca”, pero que ahora también se ven afectados. La idea es sobre todo conseguir el reciclaje de estas personas, ofreciendóles formación en los sectores emergentes en la ciudad, como puedan ser las energías renovables, la aeronáutica, que parece que puede tener hasta 20 años de carga de trabajo futura, o los servicios sociales, como la Ley de Dependencia, que requiere personal cualificado para seguir su andadura.
